La crisis económica no da tregua ni en las fechas especiales. Según un relevamiento de la consultora Focus Market, este año la ropa desplazó a los juguetes como principal regalo del Día del Niño. Un dato que refleja, más que un cambio de gustos, un golpe directo al bolsillo.

El informe, basado en casi 3.000 casos, revela que el 33% de las compras será de indumentaria, mientras que solo un 22% optará por juguetes. El resto se reparte entre libros didácticos (19%), artículos deportivos e informática (7% cada uno), calzado (5%) y rodados como bicicletas o triciclos (2%).

El gasto promedio previsto es de apenas $49.500, muy por debajo de los valores reales del mercado, lo que obligará a muchos a buscar ofertas, descuentos o directamente reemplazar el regalo por algo funcional.

“Las familias buscan estirar el peso y priorizan lo necesario por sobre lo deseado”, explicó Damián Di Pace, director de Focus Market. Según el informe, las estrategias comerciales apuntan a promociones con tarjetas, billeteras virtuales y cuotas sin interés, en un intento por reactivar el consumo.

En cuanto a los canales de compra, los centros comerciales a cielo abierto concentran el 31%, seguidos por el comercio electrónico (27%), los shoppings (23%), supermercados (10%) y outlets (8%).

En medio del ajuste, el Día del Niño se resignifica: menos juegos, más necesidades.